Mirador Santa Lucia
Estamos ante
una magnifica costa acantilada, que alcanza
50m de altura, solo interrumpida por la
playa de Comillas que se puede dividir
en tres zonas .
La primera, abarca desde la” Piedra
del Pajarito” hasta el conjunto
de rocas del Portillo (a la derecha).
La segunda es la zona central, con un
paseo marítimo y diversas instalaciones.
La tercera es la zona del puerto. Comillas
no solo posee ésta que se extiende
entre el puerto y el “Picu Miradoriu”.Está
la playa de los Muertos, detrás
del cementerio del pueblo, enmarcada en
una bahía diminuta.
La última playa comillana, aunque
no esta en el casco urbano, es la Ría
de Oyambre, que presenta ecosistemas de
gran interés. Y es que Comillas,
aunque tuvo su auge, primero ligado a
la pesca y mas tarde a sus minas y comercio
de blenda, su autentico renombre y connotaciones
aristocráticas los adquirió
a finales del SXIX, como lugar de veraneo
del monarca Alfonso XII en 1881 y 1882.
Le siguieron su Corte, gentes nobles y
adineradas gracias a un personaje de origen
modesto: Antonio López y López,
quien llego a ser el primer Marques de
Comillas en 1878. Sus relaciones con Barcelona,
con la arquitectura y artistas de la época
hicieron que hoy, se aglutinen fantásticos
edificios y que esta villa sea uno de
los centros del modernismo español.
La ermita de Santa Lucía, posee un carácter eminentemente popular con una buena imagen de la patrona, fue realizada por donación de los pescadores. Estos acudían a escuchar misa, a primeras horas, antes de salir a la mar. Es de gran simplicidad en planta y alzado, con cubierta a dos aguas, la puerta principal de madera y precedida por un pequeño porche.
Destaca una pequeña campana que
sonaba cuando las condiciones atmosféricas
eran adversas.